Corail
2015-08-25 11:10:11 UTC
Hola a todos:
Solo por divagar un poco...
Las dos diferencias más importantes entre los trenes y el resto de vehículos terrestres son el guiado físico de la composición y la poca adherencia entre la rueda y el carril, ambos de metal.
Pensando en los automóviles, camiones y motocicletas, podría parecer que el tren está lleno de desventajas. Sin embargo, esas "desventajas" son también sus mejores virtudes.
La necesidad que hizo posible el invento del ferrocarril fue la de mover grandes cargas en grandes distancias. En pleno siglo XIX la velocidad máxima para cualquier tipo de viaje era la del galope de un caballo y nadie se planteaba ir más rápido. Carruajes, trenes y animales eran más o menos igual de veloces (entre 5 y 30 Km/h) porque los viajes no se medían en horas, sino en jornadas, y el ferrocarril era el único medio que permitía transportar grandes lotes de carga de forma fácil, pero no rápida.
Luego se inventaron los motores de vapor y más tarde los de explosión, que fueron elevando la velocidad. Visto desde el lado de la carretera, el ferrocarril tenía el gran problema de la falta de agarre en aceleraciones y frenadas bruscas. Construir una vía de tren era mucho más complicado que una carretera porque el tren no se podía permitir ciertas pendientes ni radios de curvas. Fue con el ferrocarril cuando se incrementó la demanda de obras de fábrica como puentes y túneles.
¿Cómo controlar el tráfico de un vehículo que "resbala" sobre su vía?
La solución fue exactamente la misma que se utilizó mucho tiempo después en la aviación comercial: crear una "zona de seguridad" en la vía en la que el tren pudiese rodar libremente sin encontrar otro tren en su camino y asegurarse de inventar un protocolo para asignar estas zonas de seguridad a los trenes implicados en la circulación.
Estas zonas de seguridad en el ferrocarril se llaman "cantones" y el conjunto de reglas del juego para asignar cantones a los trenes se llama "bloqueo".
El invento de los bloqueos permite a un tren desarrollar su máxima velocidad en la vía sin obligarle a frenar hasta que se termine su cantón, pero de forma mejorada, porque si el siguiente cantón también está libre, las reglas de los bloqueos permiten que el tren pase de un cantón a otro sin tener que reducir su velocidad. Es lo que se conoce como "paso directo" cuando los cantones ocupan toda la vía entre dos estaciones.
¿Cómo funcionan los bloqueos?
Bueno. Existen muchos tipos de bloqueo. Desde los más rudimentarios hasta los más avanzados. Todos ellos son igualmente seguros, todos impiden choques o alcances de trenes y las diferencias entre unos y otros están en la cantidad de tráfico que pueden soportar, la velocidad máxima que pueden alcanzar los trenes, el coste en personal humano y el aprovechamiento que se puede llegar a hacer de la línea.
Existen dos tipos de bloqueos. Los manuales y los automáticos.
Dentro de los automáticos existen a su vez dos grupos: Los discretos y los continuos.
Si tenéis paciencia conmigo, hablaremos de todos ellos más adelante.
Solo por divagar un poco...
Las dos diferencias más importantes entre los trenes y el resto de vehículos terrestres son el guiado físico de la composición y la poca adherencia entre la rueda y el carril, ambos de metal.
Pensando en los automóviles, camiones y motocicletas, podría parecer que el tren está lleno de desventajas. Sin embargo, esas "desventajas" son también sus mejores virtudes.
La necesidad que hizo posible el invento del ferrocarril fue la de mover grandes cargas en grandes distancias. En pleno siglo XIX la velocidad máxima para cualquier tipo de viaje era la del galope de un caballo y nadie se planteaba ir más rápido. Carruajes, trenes y animales eran más o menos igual de veloces (entre 5 y 30 Km/h) porque los viajes no se medían en horas, sino en jornadas, y el ferrocarril era el único medio que permitía transportar grandes lotes de carga de forma fácil, pero no rápida.
Luego se inventaron los motores de vapor y más tarde los de explosión, que fueron elevando la velocidad. Visto desde el lado de la carretera, el ferrocarril tenía el gran problema de la falta de agarre en aceleraciones y frenadas bruscas. Construir una vía de tren era mucho más complicado que una carretera porque el tren no se podía permitir ciertas pendientes ni radios de curvas. Fue con el ferrocarril cuando se incrementó la demanda de obras de fábrica como puentes y túneles.
¿Cómo controlar el tráfico de un vehículo que "resbala" sobre su vía?
La solución fue exactamente la misma que se utilizó mucho tiempo después en la aviación comercial: crear una "zona de seguridad" en la vía en la que el tren pudiese rodar libremente sin encontrar otro tren en su camino y asegurarse de inventar un protocolo para asignar estas zonas de seguridad a los trenes implicados en la circulación.
Estas zonas de seguridad en el ferrocarril se llaman "cantones" y el conjunto de reglas del juego para asignar cantones a los trenes se llama "bloqueo".
El invento de los bloqueos permite a un tren desarrollar su máxima velocidad en la vía sin obligarle a frenar hasta que se termine su cantón, pero de forma mejorada, porque si el siguiente cantón también está libre, las reglas de los bloqueos permiten que el tren pase de un cantón a otro sin tener que reducir su velocidad. Es lo que se conoce como "paso directo" cuando los cantones ocupan toda la vía entre dos estaciones.
¿Cómo funcionan los bloqueos?
Bueno. Existen muchos tipos de bloqueo. Desde los más rudimentarios hasta los más avanzados. Todos ellos son igualmente seguros, todos impiden choques o alcances de trenes y las diferencias entre unos y otros están en la cantidad de tráfico que pueden soportar, la velocidad máxima que pueden alcanzar los trenes, el coste en personal humano y el aprovechamiento que se puede llegar a hacer de la línea.
Existen dos tipos de bloqueos. Los manuales y los automáticos.
Dentro de los automáticos existen a su vez dos grupos: Los discretos y los continuos.
Si tenéis paciencia conmigo, hablaremos de todos ellos más adelante.